

La tendencia actual en etiquetas de vino es sorprender, ser diferente y huir de las etiquetas tradicionales y más cuando estudios recientes avalan esta tendencia.
El origen de muchos de los diseños de etiquetas de vino vienen por la osadía de innovar en un sector puramente tradicional.
Y eso señores y señoras son los verdaderos artífices de que hoy día nos paremos en un lineal de vino y nos deleitemos la vista son las etiquetas antes de poder degustar los diferentes caldos.
Uno de los trabajos más “atrayentes” e innovador de los últimos años en diseño de etiquetas de vino.
Transgresores no solo en el concepto de la etiqueta sino también en el material, utilizando tela de algodón (una camisa de fuerza más concretamente) en vez de papel.
Por supuesto el estudio creativo Lola Madrid fue más allá y creo un packaging donde recrean una habitación acolchada de un psiquiátrico para trasportar las botellas, una identidad de marca completa con un único concepto.
“No hay vida sin pecado” es el original concepto de estos vinos llevado a cabo con maestría por el estudio Sidecar design.
7 botellas diferentes y únicas que reverencian los siete vicios más importantes, un diseño osado y complejo que se vende en un pack único con las siete botellas para tentar al consumidor con belleza y el sabor de sus caldos.
Este diseño no podía ser menor ya que viene de la mano del gran diseñador de alta costura David Delfín, una etiqueta y botella de vino que juega con la ambigüedad, ya que te lleva de la mano con su imagen a los perfumes de alta costura siendo un vino tinto.
Esta bodega Riojana nos tiene acostumbrados a colaboraciones con artistas pero sin lugar a dudas esta es una de las mejores sinergias hasta la fecha que innova y revoluciona el sector vitivinícola mostrando como jugando con otro tipo de botellas no propias del sector se puede hacer cosas muy interesantes.
Un diseño minimalista hecho pureza y elegancia.
Como bien indica su nombre (Nuat=desnudo)es el diseño de esta etiqueta, puro minimal, se presenta sin artificios, sin grafismos, sin palabras vanas… Que nos evoca a la pureza.
El estudio de Claret Serrahima ha sabido llevar al máximo el mandamiento del diseño “menos es más”, ha reducido el diseño al mínimo para crear una gráfica que funciona por si solo.
Si te ha gustado lo que has leído en este post, te recomiendo: “El mundo de las bebidas a la cabeza en innovación de packaging sostenible”.
Un comentario en «5 etiquetas de vino que revolucionaron el diseño del etiquetado»
Unos diseños de verdad muy lindos y con mucha innovación de empaque